Debido a los cambios que ha sufrido la industria musical en los últimos 20 o 15 años, no solo han aparecido nuevas formas de consumir, sino también nuevas formas de financiación que, en ocasiones, hacen más fácil la llegada de grupos y artistas que no podían sumarse al modelo anterior a Internet.
Crowdfunding y fundraising En este artículo revisamos estos métodos de financiación de la industria musical.
¿Qué son el crowdfunding y el fundraising?
El micromecenazgo, o crowdfunding, es un método de financiación de proyectos en el que, en lugar de buscar un inversor que pueda ser una institución, empresa u organismo oficial, se presenta parte de ese proyecto y son personas individuales e independientes interesadas las que ponen dinero hasta llegar a un tope (meta), de forma que pueda llevarse a la práctica.
Las nuevas tecnologías son la principal herramienta de difusión de estas campañas de crowdfunding que se sirven de publicidad, y del gran alcance de las redes sociales, para difundir aquello que quieren llevar a cabo.
En algunos casos, para incentivar la inversión, se suelen dar pequeñas recompensas a aquellos que aportan dinero. Esta especie de regalos suelen ser diferentes en función del dinero que se esté aportando a la causa.
Por su parte, el fundraising, o captación de fondos, consiste en obtener dinero gracias a las aportaciones de particulares, fundaciones, empresas o agencias gubernamentales. Normalmente, ese dinero va destinado a organizaciones sin ánimo de lucro, aunque también puede hacer referencia a los inversores, o fuentes de capital, de una empresa que sí obtienen beneficio económico para sí.
¿Cómo funcionan en la industria musical?
El modelo de crowdfunding tiene la misma mecánica que si se tratase de la financiación de un libro o una película. Se trata de conseguir dinero para un proyecto específico.
Existen diversas plataformas a través de las cuales financiar un proyecto gracias a este micromecenazgo. Entre ellas destacan Verkami (centrada en financiación de proyectos culturales y creativos), Goteo.org (enfocada en temas sociales y con hasta 7 millones de posible recaudación), Mi grano de arena (para proyectos de cooperación, derechos humanos, discapacidad o exclusión social) o Ulule (en la que caben tanto iniciativas sociales como artísticas).
Hace aproximadamente un año, surgió una plataforma más específica en lo que ha financiación a través de microdonaciones se refiere. Se trata de Corite, una empresa sueca dedicada al crowdfunding únicamente dentro de la industria musical.
La mecánica de esta iniciativa es que el artista diseña una campaña a modo de presentación personal y de su música. Se fija una meta de recaudación que, según explican en su web, es lo mismo que decidir los royalties que se van a cobrar en base a un número de reproducciones estimado. El dinero adelantado será aportado por los fans y pagado por los beneficios que se obtengan de las reproducciones del disco o canción durante un año.
Para llegar al momento de la recaudación, tanto fans como inversores deben escuchar la canción y decidir, lógicamente, si la apoyan económicamente. Si el artista considera que la canción tendrá muchas reproducciones tendrá un mayor valor estimado. Esto, a su vez, implica que los patrocinadores paguen más. Además, Corite se queda con el 5% del capital recaudado y de esos futuros royalties.
Una vez la canción sale a luz, Corite se encarga de distribuirla en los diferentes servicios de streaming (Spotify, Apple Music, Amazon, entre otros). Los artistas y patrocinadores, no solo pueden seguir la evolución gracias a datos y estadísticas proporcionadas por la empresa, sino que tienen un claro incentivo para promocionarla. Tal y como explican en su web oficial, si la canción, o el disco, doblan la meta de streamings marcada por el artista al inicio de la campaña, el dinero invertido también se dobla y Corite es quien gestiona todos los pagos al respecto.
Un punto positivo de este modo de hacer es que, aparentemente, es el artista quien sigue teniendo los derechos de autor de la obra. Este solo comparte un tanto por ciento de sus ganancias con Corite durante un año. Ese porcentaje ha sido previamente fijado por el artista y es un adelanto por los royalties. Tras un año de colaboración, es cuando Corite retiene el 5% siempre que se continúe usando su servicio.
Del mismo modo en que ocurre con el micromecenazgo, la captación de fondos puede llevarse a cabo a través de métodos de financiación que no tengan por qué estar relacionados directamente con el ámbito musical, aunque luego lo recaudado vaya a parar a dicha industria.
No obstante, la situación de crisis que ha vivido (y vive) la música en los últimos meses, ha hecho que se esté planteando un nuevo modelo para el sector, tal y como se habló en el último artículo publicado en este blog.
Por ello, en abril de este año, Spotify puso en marcha una herramienta de fundraising para que los artistas que lo consideren puedan activar esta opción de recaudación. La plataforma de streaming musical la ha bautizado como “Artist Fundraising Pick”.
Los usuarios que tengan Spotify for Artists, podrán hacer uso de esta nueva herramienta para la captación de fondos, siempre que lo hagan a través de la aplicación Cash App (que colabora con Spotify en esta iniciativa) y que sean residentes en Estados Unidos o Reino Unido, ya que la iniciativa se ha puesto en marcha en estos países.
Spotify está intentando llevar esta función al mayor número posible de personas, debido a la situación de crisis global en la que se encuentra la industria musical. Por el momento, en España los artistas tienen la opción de añadir un enlace de Paypal para poder recaudar fondos.
Es posible que, como consecuencia de los últimos meses y de la emergencia sanitaria que ha obligado a paralizar a la industria, las estrategias de recaudación vayan cambiando y siendo cada vez más proclives a métodos de financiación a través de internet como lo son el crowdfunding y el fundraising. Habrá que esperar unos meses, o quizá unos años, para ver si realmente se produce un cambio importante en el modo de financiación de la música a nivel global.
Enlaces de interés:
Mejores plataformar de crowdfunding en España.
Spotify facilita que los artistas puedan recaudar dinero a través de la aplicación.
Artículo de Silvia Panadero para el Blog del Máster en Music Management